Ante las noticias que afirman que el Ministerio de Fomento prepara la creación de una sociedad de capital mayoritariamente público para rescatar a 10 autopistas de peaje ruinosas y que acumulan una deuda de más 3.000 millones de euros, EQUO ha expresado su más absoluto rechazo a que se dedique ni un euro público a rescatar estas infraestructuras.
EQUO ha afirmado que es “inaceptable que en un contexto de fuertes recortes en sanidad y educación y con miles de familias condenadas a una situación de exclusión social, se destine dinero público para salvar estas autopistas que nunca debieron construirse”.
En concreto, se trata de las radiales de Madrid R-3, R-5 y R-4, la autopista Madrid-Toledo, la Ocaña-La Roda o la Cartagena-Vera, todas ellas en concurso de acreedores.
Para el coportavoz de EQUO Juan López de Uralde, “no tiene sentido que tenga que ser de nuevo la ciudadanía la que tenga que asumir este despilfarro que se llevó a cabo por una mala gestión o por con intereses urbanísticos y de negocios poco claros”.
“Algunas de estas autopistas que ahora tenemos que rescatar no han llegado ni al 10% del tráfico previsto. ¿Por qué se construyeron? Está claro que ha habido gente que se ha beneficiado de ello, y ahora nos dicen que tenemos que pagar el desastre, que además ha tenido un enorme coste medioambiental. Nos parece inaceptable” ha señalado Uralde quien ha afirmado que nada puede justificar que se gasten millones de euros en rescatar unas autopistas innecesarias.