El Ayuntamiento de Málaga ha implementado la automatización de la planta de tratamiento mecánico-biológico y la construcción de una nueva planta de biorresiduos en el Centro Ambiental de Los Ruices. El alcalde Francisco de la Torre, junto a las concejalas Teresa Porras y Catalina García, ha visitado estas instalaciones que suponen una inversión total de 16.772.200 euros financiada por la Unión Europea a través de fondos Next Generation.
La automatización de la planta mecánico-biológica duplicará la capacidad de tratamiento de residuos de la fracción resto del contenedor gris, pasando de 100.000 a 200.000 toneladas anuales. El sistema triplicará la tasa de recuperación de materiales reciclables como plásticos, papel-cartón y metales mediante tecnología automática que sustituye los procesos manuales anteriores.
La modernización incluye la instalación de cinco nuevos trómeles de cribado, dos separadores balísticos, cinco separadores ópticos, separadores inductivos y magnéticos, equipos abrebolsas y una nueva cabina de triaje secundario. También se han instalado sistemas de almacenamiento automático y nuevos equipos de prensado para gestionar el aumento del volumen de materiales reciclables.
La nueva planta de biorresiduos procesará entre 15.000 y 20.000 toneladas anuales de materia orgánica del contenedor marrón y restos de poda para convertirlos en fertilizante de calidad. Las instalaciones cuentan con cuatro áreas diferenciadas: pretratamiento y selección, tratamiento biológico mediante compostaje automatizado, afino del compost y tratamiento de aire para neutralizar olores.
El proyecto de biorresiduos ha costado 6.027.003,48 euros con aportación municipal de 2.870.851,91 euros, mientras que la modernización de la planta mecánico-biológica ha supuesto 10.745.197,17 euros con 5.189.662,26 euros de fondos municipales. La planta de biorresiduos se autoabastecerá completamente de energía eléctrica renovable producida en el complejo mediante aprovechamiento del biogás del vertedero.